La crisis del Covid-19 cambiará drásticamente los hábitos de viaje para siempre. De hecho, el 83% de los viajeros no espera regresar a sus rutinas de viaje una vez que termine la pandemia, según una encuesta elaborada para Inmarsat.
Además, solo un tercio (34%) de los pasajeros encuestados ha tomado un vuelo comercial desde que comenzó la pandemia, y esto parece haber provocado un cambio en las actitudes hacia los vuelos. Cuatro de cada 10 pasajeros (41%) esperan viajar menos por cualquier medio y un tercio (31%) planea volar menos. Este sentimiento es aún mayor entre los pasajeros asiáticos, con un 58% en India y un 55% en Corea del Sur que planean viajar menos en el futuro.
A pesar de estos datos, hay señales tempranas de que los viajeros están comenzando a sentirse seguros de volver a volar ya que casi la mitad (47%) de los pasajeros encuestados esperan sentirse listos para volar en los próximos seis meses.
Además, esta misma encuesta revela que el 60% de los pasajeros se sienten satisfechos con la respuesta de la industria de la aviación a los desafíos del Covid-19, lo que supone una razón para que las aerolíneas alienten a los pasajeros a regresar a los cielos.
Menos cómodos en los baños
Actualmente, los viajeros tienen más miedo de contraer el virus en el extranjero que en el avión. De hecho, muchos piensan que tienen un mayor riesgo para la salud en otros entornos, como el gimnasio y el transporte público.
Si bien los pasajeros se sienten más confiados en el control de pasaportes, la seguridad y la comunicación con la tripulación de cabina, se sienten menos cómodos visitando el baño durante el vuelo y estando cerca de otros. El estudio indica que las soluciones que minimizan los puntos de contacto y reducen las interacciones serían las más avanzadas para abordar los puntos débiles, como los pagos sin contacto en vuelo (83%) y las colas de seguridad escalonadas (84%).
Cuando se trata de garantizar la seguridad personal, los pasajeros han ignorado la cuarentena automática de 14 días. En cambio, los resultados muestran el deseo de un conjunto consistente de medidas para hacer el viaje más seguro, como cubrirse la cara obligatoriamente o una prueba de 48 horas antes del viaje.
Casi la mitad de los pasajeros (44%) dice que la reputación es ahora un factor más importante al elegir una aerolínea de lo que era antes de la pandemia. Por lo tanto, nunca ha sido más vital para las aerolíneas diferenciarse y obtener una ventaja competitiva. La investigación destaca que mejorar la experiencia a bordo es una forma de lograrlo. Desde espacio adicional para las piernas (43%) hasta equipaje gratuito (39%), los servicios de valor agregado son cada vez más importantes para los pasajeros que regresan a los cielos.
Las soluciones digitales se están convirtiendo rápidamente en esenciales para una experiencia agradable a bordo, y casi cuatro de cada 10 (39%) están de acuerdo en que el Wi-Fi a bordo es más importante hoy que nunca. Las alertas de estado del destino, el seguimiento de equipaje en tiempo real y la autorización previa de inmigración en el avión, todo ello habilitado por la conectividad de la cabina, se encuentran entre los principales aspectos nuevos del viaje que los pasajeros desean mantener después de la pandemia.
Philip Balaam, presidente de Inmarsat Aviation, asegura que “dado que la seguridad y la reputación se vuelven aún más importantes para los viajeros de hoy, existe una clara necesidad de que las aerolíneas se diferencien para animar a los pasajeros a regresar a sus vuelos. La digitalización está en el corazón de ambos; minimizar los puntos de contacto críticos en el viaje del pasajero para mejorar la confianza, al mismo tiempo que mantiene a los pasajeros conectados y entretenidos”.
Leer también: Transporte interprovincial movilizó a más de 2.3 millones de pasajeros