- Lima no es la excepción y hospedajes en Miraflores, San Isidro y San Borja son los más afectados.
La oferta de hoteles tres y cuatro estrellas en el mercado peruano vienen sufriendo pérdidas, desde el 2018, como consecuencia de la aparición del servicio de alojamiento AIRBNB.
El Director del Observatorio Turístico del Perú (OTP) de la USMP, José Marsano, considera que el panorama se presenta desfavorable en esta competencia por los precios bajos que ofrece esta economía colaborativa al estar exentas del pago de un tributo al Estado. Los turistas podrían llegar a pagar en una AIRBNB hasta 1/12 del precio de un hotel tres y cuatro estrellas (dependiendo de la cantidad de personas) lo que representa una competencia desleal para estas empresas quienes, en la capital, han visto una reducción del 50% de clientes este año en comparación con el 2018.
Marsano manifiesta que no solo los servicios en los hoteles están mermando en calidad, sino que las grandes cadenas hoteleras podrían llegar a ver al Perú como un país no tan seguro para invertir.
Por ello, una de las propuestas del Director del Observatorio Turístico de la USMP es que las modalidades de economías colaborativas sean reguladas y tributen, por ejemplo, un 5%. De esta forma habría una tendencia a nivelar los costos evitando la informalidad. En la actualidad, varias ciudades del mundo han adoptado estas medidas como Ciudad de México, Madrid y Chile.
En el sur, la zona más afectada es el Cusco (Valle Sagrado). Según cifras del OTP, hay un detrimento entre el 20 y 30% en la tarifa de los hoteles de tres y cuatro estrellas. Es decir, si un cuarto simple bordeaba los 120 dólares hoy el precio es de 84 dólares debido al factor AIRBNB.
Este efecto indirectamente está empezando a originar una reducción inusual de un 2.02 % de turistas en la ciudad imperial y se estima que podría elevar dependiendo de las ofertas de esta modalidad que compite deslealmente con la actividad hotelera.