- Evaluación se realizará por seis días y permitirá determinar el estado poblacional, biomasa y disponibilidad de semillas del recurso.
El Ministerio de la Producción (Produce) a través del Instituto del Mar del Perú (Imarpe) iniciará hoy el monitoreo biológico-poblacional del recurso concha de abanico (Argopecten purpuratus) para determinar el estado poblacional y condiciones oceanográficas de su hábitat frente al mar del Callao.
El monitoreo se realizará por seis días (hasta el 24 de octubre) y permitirá estudiar, entre otros aspectos, la biomasa y disponibilidad de semillas de concha de abanico, así como la estructura de tallas, distribución del recurso por subáreas y estratos de profundidad, y evolución del proceso reproductivo.
Los trabajos se realizarán en toda la extensión del banco natural de recursos bentónicos del Callao y contarán con la participación de embarcaciones y buzos artesanales de la región, así como la Dirección de Capitanía y Guardacostas (DICAPI).
Concluido los seis días de investigación, Imarpe emitirá una evaluación que permitirá formular al Ministerio de la Producción las medidas de ordenamiento para la extracción racional de la semilla de concha de abanico del banco natural en el Callao, las cuales serán trasladadas hacia las concesiones acuícolas a través de embarcaciones pesqueras artesanales con permiso de pesca vigente.
Esta actividad redundará en el beneficio de la comunidad pesquera artesanal y marisquera del Callao.
Recurso concha de abanico
Las conchas de abanico se caracterizan por ser una buena fuente de proteína y aminoácidos, nutrientes necesarios para mantener músculos sanos, reparar tejidos y promover la síntesis hormonal (desarrollo de hormonas). Además, aporta minerales como selenio y fósforo, microminerales importantes para los procesos metabólicos (actividad que transforma la materia en energía), y para el crecimiento y mantenimiento de huesos y dientes.
Un molusco que contiene vitamina B12, nutriente que ayuda en el proceso de maduración de glóbulos rojos, los cuales se encargan de transportar oxígeno a todas las partes del cuerpo.
Por otro lado, su consumo reduce los riesgos de padecer de problemas cardiovasculares, desarrolla el cerebro, mejora la función del riñón y contrarresta inflamaciones.
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